De las lógicas, incoherencias y estrategias del colectivo LGTB en Argentina
(o cómo no tranzar con los burócratas rosa)
(título de Eduardo Mattio)
A casi dos años de que nos expulsaran de la CHA
Lo prometido es deuda, más abajo reproduzco el mail que recibimos los entonces militantes del Área Jóvenes de la CHA, informándonos de nuestra expulsión de la organización. Ya era hora de hacer público su contenido al que agrego un texto, que aunque es un poco extenso, me sirve para darle contexto a esa ruptura y aclarar algunas tergiversaciones maliciosas que circularon. Gracias por leer!
El viernes anterior a recibir el mail, se había realizado la postergada asamblea mensual en la que correspondía realizar la nueva elección de autoridades. En esa asamblea lxs integrantes del entonces Área Jóvenes pedimos que se realice la elección correspondiente y comentamos que nuestra propuesta iba en el sentido de poner en discusión el espacio de la Secretaría. Luego de un breve debate en la que la mayor resistencia la expresó Cesar Cigliutti, con un discurso contradictorio y sin argumentos sobre la ofensa que le provocaba la propuesta y las formas que nos endilgaba sin reflexionar sobre las suyas propias, se habilitó el debate. Durante este, contamos nuestras propuestas y se desarrolló la reunión según lo que resumo brevemente en los siguiente puntos:
- Lxs compañerxs del área jóvenes me habían propuesto a mí para presentarme a ese “cargo”, pero como nos interesaba más valorizar la discusión y como entendíamos que, si nos ateníamos al reglamento que exigía la votación, nuestra propuesta se convertía en imposición ya que éramos una amplia mayoría desde hacía al menos tres años, también propusimos que la decisión surja del consenso y el debate y no del voto de la mayoría, y también sugerimos que se hagan otras propuestas para responsables de ese puesto.
- Aceptamos desde la buena fe postergar la reunión hasta el miércoles siguiente, ya que estaban ausentes tanto Paradiso como Trerotola (quien no participaba de una asamblea hacía meses, y, en un sentido más regular, hacía dos años), y porque reconociendo el ánimo nervioso que expresó Cigliutti durante toda la discusión, nos parecía un buen gesto no insistir en cerrar el debate en ese momento. Se nos hizo creer que existía una apertura cuando en realidad se terminaba de preparar la cama que nos estaban armando y que llevó la firma indeleble del ilustre César Cigliutti.
- Al lunes siguiente por la noche recibí una llamada de Suntheim, invitándonos a Martín Lanfranco y a mí a una reunión privada con él, Cigliutti y Paradiso, que en principio rechacé porque se realizaría sin la presencia del resto de los activistas, porque no era lo acordado en asamblea y porque no terminaba de aclarar cuáles eran los motivos o fines de dicha invitación. A la noche siguiente, a la misma hora en que nos citaban para esa reunión privada, recibimos el mail de expulsión redactado por Paradiso.
- Luego de que enviaran dicho mail, borraron por completo la lista de correo oficial de la CHA, con todo su contenido. De esta manera eliminaron 14 años de registro, debates, documentación e historia, cuando con bloquearnos en esa lista era más que suficiente. También borraron todos los accesos a nuestro mail, toda referencia hacia nosotrxs en la página web, y no atendieron más un llamado nuestro o respondieron un correo.
- Más tarde nos enteramos que en una asamblea apresurada, previo apriete a varixs activistas, que de todas maneras se fueron de la organización, “eligieron” a Pedro Paradiso, mano derecha de Cigliutti, como nuevo secretario y a Marcelo Sunthein se lo asignó como Fiscal. El lamentable personalismo de la pareja Suntheim-Cigliutti se puede observar en los nuevos comunicados que incorporan por primera vez en la historia de la CHA al “fiscalizador” como figura política relevante.
- Desde entonces hemos tolerado diversas provocaciones y demostraciones de fuerza por parte de estos personajes, en especial cuando confluimos en los debates parlamentarios por la LIG o en ámbitos laborales. Pero como el silencio no es una virtud que me caracterice, para mí llegó el tiempo de expresar algunas cuestiones y hacer algunos descargos sobre su relato:
Desde que empezamos nuestra participación en la CHA, fuimos quienes sostuvimos criterios militantes e ideas diferentes a las que, más tarde entendimos, ahí estaban acostumbradxs. No nos callábamos cuando se rompían consensos comprometidos en asamblea. No queríamos dejar la discusión para después cuando se insistía con imponer un discurso patologizante sobre las personas trans (para nuestro espanto se habló de situación de enfermedad, de no fijación de testosterona, de cerebros de mujer y de varón, de cuerpos no correspondidos). No temimos nunca dar el debate sobre la toma de decisiones, algunas tan sensibles como reunirse con Macri para "charlar" sobre el nuevo código de convivencia; apoyar a Anibal Ibarra públicamente tras la tragedia de Cromagnon; participar institucionalmente de una gala para la reina de Holanda; acordar con la Federación los manejo espurio y partidario que están haciendo hace años de la Marcha del Orgullo; involucrar a la CHA con un festival privado de “cine erótico” que buscaba promocionar a las principales productoras de pornografía de Europa y EEUU. Todas esas discusiones las dimos hacia adentro, y hacia afuera mantuvimos nuestro sentido de organización. Quizás haya sido un error, pero valorábamos mucho el trabajo que veníamos haciendo con juventud, para abandonarlo junto con las responsabilidades que teníamos asumidas, y creímos que podíamos transformar algo que hoy lo entendemos de forma diferente: mientras esa sea su dirigencia, esa será la CHA.
En las reuniones del área, la poca idoneidad y ausencia de trabajo del secretario era una discusión regular, en especial ante la falta de respuestas de su parte. La sede (hogar del matrimonio Cigliutti-Sunheim, nunca permitieron que sea de otra manera) se encontraba clausurada hacía dos años para casi toda actividad, no intentaron siquiera garantizar otro espacio y obstaculizaron y boicotearon las propuestas que llevamos para conseguir otro lugar. Durante el debate por el matrimonio no se respondieron, literalmente, miles de mails con consultas jurídicas, personales y periodísticas. Cientos de consultas por el espacio de jóvenes durmieron durante meses en el mail y el contestador automático que manejaba Suntheim. El entonces secretario llegó incluso a enemistar a la organización con la dirección del diario Página/12, a partir de lo cual dejaron de cubrir nuestras actividades. Hicieron todo lo posible por apartarnos de determinados debates y nos ocultaban información de la que nos enterábamos luego por los medios. Cuando no les resultaba útil invisibilizaban a nuestro espacio, pero cuando les era provechoso se apropiaban de nuestro trabajo. Tanto es así que en el año 2010, Pedro Paradiso viajó al encuentro latinoamericano de ILGA como supuesto representante de la CHA (posición de la que tampoco se permitió nunca la discusión, y desde la que Paradiso decidía de forma unilateral quien lo acompañaba en esos viajes), en el que presentó nuestro trabajo en juventud y bullying, el grupo de jóvenes y la publicación "salí del closet" como propios, con la posterior promesa de una apertura a ser invitadxs en un futuro (sic ¿¿??). Por supuesto, esa apertura nunca llegó ni iba a llegar.
Sobre nuestra construcción, quiero valorar que fue tan diferente a lo que estaban acostumbrados en la CHA, que permitió el acercamiento de la organización a militantes y espacios con lo que las diferencias parecían insalvables. Así, junto a otros compañeros como Emiliano Litardo, pudimos consolidar vínculos de militancia (y en muchos casos también de amistad) que dieron origen al Frente Nacional por la Ley de Identidad de Género, espacio que fue muy resistido por el presidente de la CHA, y que usaba como caballito de batalla para acusarnos en las últimas asambleas que participamos de atentar, contra los “intereses institucionales” (o más bien entiendo, los suyos).
Sobre la LIG, el tiempo nos dio la razón. Nos negamos, hace años en la CHA, a resignar el debate sobre los derechos de las personas trans a la disforia patologizante, que eran los términos de lo que entonces presentaban como posible, y por ende, deseable. Ni tampoco quisimos durante el debate por la ley, resignarnos a ir por menos que por todo. Y lo que logramos desde el FNLIG fue la sanción de la mejor ley aprobada hasta ahora sobre identidad de género, acompañando con humildad, militancia y esfuerzo el trabajo incuestionable de Mauro Cabral, Lohana Berkins, Blas Radi, Emiliano Litardo, María Luisa Peralta, Diana Sacayan y muchxs compañerxs más.
Para algunxs de nosotrxs, que estábamos desde hacía más tiempo en la organización, esa exigencia de respeto a los consensos sobre quienes mantenían cautiva la voz y la referencia institucional, tuvo sus costos, porque tratábamos de ser tan estrictxs con el respeto a las decisiones asumidas en asamblea, que entrabamos en conflictos innecesarios con nuestrxs propixs compañerxs de Área. Entonces, aprovecho para cursar una disculpa sincera hacia quienes pudieron sentir que no dábamos el espacio suficiente para alguna iniciativa, nunca fue nuestra intención, quienes nos conocen saben que siempre buscamos generar mayor participación, apertura y horizontalidad; entiendo hoy que aun sin intención pudimos haber reproducido los límites que nos imponía el institucionalismo.
Para finalizar y más concretamente sobre el contenido del mail, hago algunas precisiones por si son necesarias:
- En el texto se nos acusan de faltar a nuestras obligaciones legales, de inconducta agravada, de intentar un golpe institucional, de rechazar el dialogo y la construcción colectiva. No serían tan ofensivas en sí mismas esas acusaciones tan ridículas, si no fuera porque quienes las sostienen son los que han hecho alarde de esas “virtudes” militantes no solo dentro de la CHA, sino en el movimiento lgtb argentino en general.
-A título personal me parece fundamental hacer el siguiente descargo: yo no tenía un interés particular, político, mediático, ni mucho menos económico por ese “cargo”, porque los entendí siempre así, entre comillas. NO fue una propuesta personal (como lo expresan en el mail) sino colectiva, y teníamos en claro en nuestro grupo que yo me hacía cargo de ese rol solo si la secretaria se asumía como un compromiso colectivo, y esto fue correctamente expresado durante esa asamblea. Además se me acusa de ir con un plan ya preparado de Secretaria, y aunque no existía un plan maquiavélico como lo quisieron presentar, si es verdad que veníamos discutiendo la necesidad de una mejor construcción de la Secretaria de la CHA, totalmente abandonada por el marido de Cigliutti, con su absoluta connivencia. Queríamos construir un espacio que no descansara en los personalismos, que intentara ser más eficiente y menos frívolo en su acercamiento con las bases, con otrxs militantes y con las personas que requerían nuestra ayuda. Una construcción que no corriera detrás de la agenda mediática para acumular otro recorte de diario lleno de nombres propios. Y vuelvo a remarcar, buscábamos una construcción colectiva, que fue lo que siempre rechazó Suntheim, quien nunca supo o quiso trabajar en equipo, quien manejaba la información institucional como secretos de la SIDE, y quien puso en riesgo e incluso hizo caer trabajos importantes de la organización por su incapacidad de involucrar a otrxs militantes en esas acciones.
- Si yo era el responsable de las obligaciones correspondientes como fiscal interino (en realidad era suplente, y puede verificarse en el libro de actas que nunca asumí funciones ni recibí instrucciones del fiscal titular), ¿por qué la expulsión es firmada por el fiscal titular quien no se encontraría en funciones?
- Los compañerxs que se retiraron antes fue porque unx de ellxs recibió la noticia de que había fallecido un familiar, sin embargo para quienes nos expulsaron, eso fue una prueba del intento de golpe institucional que intentamos dar.
- Uno de los motivos por los que no hicimos público el contenido del correo y no dimos una respuesta más dura en otro momento fue porque intentamos proteger a algunxs compañerxs, ya que también se atreven a una clara amenaza laboral, probablemente la variante más patética de todas las expulsiones de la CHA.
- Nos hacen también un reclamo que solo puedo evaluar como una muestra más de su desproporcionado cinismo, ya que el uso de la lista de correo y la circulación de información es una de las cuestiones sobre las que más hemos discutido. Luego de lo relatado en las líneas previas, no considero que haga falta decir más sobre el poco respeto que nos han demostrado por las formas democráticas. Aunque de ser necesario, conservamos decenas de mails en los que pedimos respuesta sobre algunas de sus “inconductas” que nunca recibieron una respuesta, o en los que ellos mismos desestiman el uso de la lista para tomar decisiones o sostener debates. Sin embargo, su contradicción no necesita de mayores demostraciones más que su propia actitud: luego de la expulsión eliminaron por completo la lista de correo y todo su contenido, 14 años de debates y registro documental eliminados en un par de clicks (CHA 2.0).
- Se hace referencia a que la decisión de expulsar a 14 militantes surgió de una reunión de la totalidad de la Comisión Directiva, exigencia legal ineludible para tomar una medida semejante. Pero esto no se cumplió, ya que varixs de nosotrxs éramos parte de esa Comisión, a diferencia de algunxs de lxs firmantes. Lxs coordinadores de Áreas, para la IGJ ante la que deben responder las organizaciones con personería jurídica, no conservan ningún valor legal, en cambio sí lo tienen el Tesorero, el Fiscal Suplente (o según ellxs, Fiscal Interino), y los Vocales Titulares y Suplentes.
- También sumaron de forma inconsulta la firma y conformidad sobre la expulsión, de la totalidad de lxs activistas de la CHA. Entonces, varixs de ellxs renunciaron después de recibir ese correo, porque rechazaron la decisión con la que se los intentó comprometer.
- Quien escribió y envió el mail de expulsión es Pedro Paradiso, abogado que no debe desconocer las obligaciones de una organización con personería jurídica, los términos que ordena el estatuto, o la vulgar falta de rigor legal en las acusaciones que nos endilgó. Pero además, hace aseveraciones mentirosas sobre nuestras propuesta y sobre el desarrollo de una reunión en la que no estuvo presente.
Les agradezco la buena intención de muchxs que en estos dos años han sugerido un posible acercamiento o diálogo, pero resulta fácil comprender que no hay diálogo posible, que no tiene que ver con el rencor, tiene que ver con los principios y las éticas de las que cada unx se hace cargo. Mi vida y mi militancia no va en el sentido de dejar tranquilx a nadie, si a alguien le hace ruido la actitud de sus amigos-admirados-cha, que lo resuelva con su psicólogx, pero por favor cesen YA de invitarme a hacer las paces con nuestros agresores.
Esto no es una interna, esto es una práctica habitual de las organizaciones lgtb (esta semana nos enteramos de una nueva expulsión en la FALGBT, hace unos meses pasó algo similar en el Bachi Mocha Celis), legitimada por la indiferencia de quienes rechazan la incomodidad de hacerse cargo de estos debates. Legitimada por los aplausos de quienes festejan sus logros y que a la vez se niegan a conocer como se construyeron dichos logros y qué tanto le pertenecen a tal o cual referente. Que cuentan con la complicidad de quienes dicen buscar una unidad imposible para un “movimiento” sostenido en los personalismos y acostumbrado a rendir pleitesías, y que cuando no se responde a esa lógica, intentan borrarte de toda historia, aun cuando el registro del propio trabajo no lo permita (Lo irónico es que después estos mismos repiten hasta el hartazgo la palabra “histórico”, me pregunto ¿invisibilizar y extender un cono de silencio -muchxs se plegaron a lo que propusieron Cigliutti y cía: "de eso no se habla"- alrededor de militantes que han sido maltratadxs de esta manera, no es otra forma de violencia?).
La historia se puede rescatar miles, millones de veces, a pesar de los esfuerzos de quien sea para que eso no ocurra. Estas organizaciones y sus satélites, que en la hegemonía del micromundo lgtb imponen agendas y discursos, también imponen relatos.
Se demoró un poco, pero esta es mi respuesta a ese relato. Y no hay veneno ni mala leche ni mucho menos envidia, chicana habitual que intenta desligitimar este tipo de voces, para no tener que hacerse cargo de este debate. Hay alivio, porque a pesar de la forma violenta que eligieron como método de ruptura, aceleraron un proceso del que ya nos veníamos haciendo cargo, y por lo menos a mí, me permitió entender a la militancia lgtb desde otro lugar, hacer nuevas lecturas y tomar una muy sana distancia. Y me regaló un tiempo que pude volcar de lleno al trabajo en el Frente, en el feminismo y en la lucha por el aborto, junto a militantes y amigxs de lxs que uno siente el placer de poder seguir aprendiendo, en vez de seguir perdiendo el tiempo con molinos de vientos construidos con madera podrida.
Nuestra venganza es ser felices!
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"Pedro Anibal Paradiso Sottile" pedro@***************.com.ar
IMPORTANTE - Decisión Asamblea de Emergencia-CHA
Mar, 22 de Mar, 2011 10:05 pm
Lo ocurrido en la reunión mensual de este viernes pasado (18/03), en la que los coordinadores del Área de Jóvenes presentaron la institucionalmente trascendente novedad que existe otro candidato a ser secretario de la CHA, y que Luis De Grazia (que era fiscalizador interino saliente, y principal responsable de la transparencia de las elecciones institucionales) se propone para ser secretario de la CHA y nos anuncia el mismo que tiene ya un proyecto de trabajo en la Secretaría institucional y que, siendo evidente además que habían resuelto en el Área esa propuesta, y que además traían una mayoría de votantes (dos de los cuales se retiraron inmediatamente después que se acordó posponer el tema de las elecciones), todo esto sin darlo a conocer por la lista institucional de la organización, son hechos que explican por si mismos que la confianza en la capacidad de consensuar todos los temas institucionales mas importantes de la organización en la que trabajamos juntos todos los días, ya se había perdido. A todos/as los/as referentes actuales de la CHA, Comisión Directiva y todos los coordinadores de Área (excepto los referentes del Área de Jóvenes) se nos hace inimaginable el trabajo conjunto el día después. Sin confianza y sin honestidad.¿Cómo respetar el trabajo por consenso con un grupo de compañeros que ocultaron semejante información y trajeron una mayoría de su área para intentar imponerse ?. Debió ocurrir lo que ocurrió para que quedara claro que ustedes, Luis, Martin, Ariel, Nahuel, Pablo descreen en el diálogo y el consenso con todos los referentes de las otras Áreas y con otros activistas históricos de la CHA.
Queda claro también, acá y en cualquier otra organización que trabaja por consenso, que cuando se intenta imponerse de manera oculta, se produce un golpe a los principios de confianza y diálogo. Y si esto ocurre en circunstancia electoral, en que Luis, como fiscalizador interino, era el principal responsable de vigilar la publicidad de los candidatos y la transparencia del proceso eleccionario, es también, un intento de golpe institucional agravado.
Es por esto que decidimos que ya no seguimos trabajando en la misma organización
A continuación, les informamos lo consensuado por la Comisión directiva de la CHA y los coordinadores de Área Jurídica, Salud, Cultura y activistas de la CHA :
Por decisión de las autoridades de la Comisión Directiva de la CHA y de los Coordinadores del Área Jurídica, Área de Salud y Área de Cultura de la Comunidad Homosexual Argentina, reunida en los términos que ordenan los estatutos institucionales ante situaciones de peligro institucional, y con el consenso de todos los y las activistas que no han participado de la actitud arriba relatada, inscriptos como asociados a la CHA, se resuelve:
Levantar la asamblea convocada para mañana miércoles a las 21.00 horas y se la prorroga con fecha a determinar por Consenso.
Se expulsa de su cargo y de la organización por incumplimiento de funciones agravado e inconducta agravada y otros motivos estatutarios vigentes al fiscalizador Luis Hernán De Grazia.
Se expulsa de su cargo y de la organización por incumplimiento por inconducta agravada y otros motivos estatutarios vigentes al tesorero Martin Andres Lanfranco.
Se expulsa de su cargo y de la organización por inconducta agravada y otros motivos estatutarios vigentes a Nahuel Torcisi, Ariel Sanchez, Pablo Colque y Martin Oliva.
Se sanciona con suspensión temporaria de la membresía a la CHA (dejan de ser activistas de la CHA), hasta tanto la Asamblea General Ordinaria de la CHA resuelva la situación de cada caso particular, caso por caso, de todo otro/a activista del Área de Jóvenes que trabaja actualmente en el INADI cuya lista de nombres guarda el Área Jurídica.
Se resuelve además que la coordinación de Área de Jóvenes de la CHA, hasta tanto la Asamblea de la CHA determine, será llevada adelante por los coordinadores de las restantes Área en conjunto.
Se resuelve poner bajo control asambleario de la CHA a todo medio de comunicación institucional, listas de áreas, paginas webs, blogs y todo tipo de espacio virtual propiedad de la Comunidad Homosexual Argentina, toda vez que lleve su sigla o nombre institucional.
Se encomienda al Coordinador del Área Jurídica arbitrar los recaudos legales para preservar el patrimonio, proyectos y trabajos institucionales propiedad de la CHA.
Firman
César Cigliutti, Presidente
Edgardo Marcelo Suntheim, Secretario
Gerardo Andrades, Fiscalizador Titular
Pedro Paradiso Sottile, Coordinador Área Jurídica
Valeria Paván, Coordinadora Área de Salud
Diego Trerotola, Coordinador Área de Cultura
Acompañan la firma, todos/as los/as activistas asociados a la Comunidad Homosexual Argentina
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